LA SELECCIÓN ARGENTINA TERMINÓ LA PRIMERA RONDA EN EL SEGUNDO LUGAR DEL GRUPO A TRAS LA VICTORIA ANTE COSTA RICA POR 3 A 0, Y SU PRÓXIMO RIVAL EN CUARTOS DE FINAL PUEDE SER URUGUAY, PERÚ O MÉXICO.
POR MELINA DIONISI
La Selección argentina respira. Logró clasificarse a cuartos de final tras la goleada 3 a 0 ante el joven equipo costarricense, sin embargo, lejos estuvo de alcanzar el nivel esperado.
Antes de comenzar la Copa América, se daba por sentado que Argentina iba a pasar sin problemas la primera ronda, por lo que los sorpresivos empates ante Bolivia 1 a 1 y ante Colombia sin goles, obligaron a la Selección a ganar en su última presentación frente a Costa Rica para acceder a cuartos sin depender de terceros y para cambiar esa imagen que habían provocado la desilusión y el desconcierto tanto del equipo como del público en Santa Fe, que expresó su enojo con insultos, cantos y reproches contra los jugadores y el técnico Sergio Batista.
Se necesitaba un cambio de esquema, y ante Costa Rica la Selección finalmente pudo demostrar una mejora principamente gracias a las buenas actuaciones de Fernando Gago, que debutó como titular y fue uno de los mejores jugadores en la noche cordobesa y Lionel Messi, que no había podido demostrar su talento en los encuentros anteriores. El mejor jugador del mundo fue el autor de las asistencias a Agüero y Di María en el segundo tiempo y se llevó la ovación de la gente que tanto había esperado recibir.
Argentina clasificó segunda del Grupo A y debe esperar a su rival, el segundo del Grupo C, que pueden ser Uruguay, México (se enfrentan hoy) o Perú, pero sería un error que la victoria ante Costa Rica tape el mal rendimiento demostrado los primeros encuentros. Lo positivo, hubo una mejora en el juego colectivo y salieron a flote las individualidades. Lo negativo, se vienen partidos contra equipos mucho más duros y encontrar el funcionamiento ideal será el gran desafío de la Selección si aspira llegar a la final.
